Desde el Espacio de Géneros del Frente Popular Darío Santillán (Corriente Nacional) en Mar del Plata haremos el lanzamiento de la “Campaña Contra la Violencia de Género” el día 20 de Julio a las 11hs en Plaza Mitre (Av. Colon e/ San Luis e Irigoyen). La misma consistirá en una serie de actividades durante los meses siguientes.
Cada 15 días nos encontraremos en las distintas plazas de la ciudad difundiendo y otorgando material con respecto a esta problemática social que día a día se cobra la vida de una mujer en nuestro país.
Además estaremos realizando actividades culturales y artísticas, instancias de debates, talleres, entre otras que permitan visualizar y generar un espacio organizado que pueda proponer alternativas integrales y eficaces para erradicar, prevenir y terminar con la violencia de género.
“la violencia de género es la violencia ejercida
contra alguien en función de su género, en su mayoría se da contra las mujeres
por su condición de mujer. Esta violencia representa numerosas facetas que van
desde la discriminación y el menosprecio hasta la agresión física o psicológica
y el asesinato. Produciéndose en muy diferentes ámbitos; adquiere especial
dramatismo en el ámbito de la pareja y en lo doméstico, en el que anualmente
las mujeres son asesinadas a manos de sus parejas por decenas o cientos en los
diferentes países del mundo”
Mucho dicen las
cifras sobre las violencias hacia las mujeres, también son noticia en los
medios cuando ya no se puede hacer nada. Todos los días muere una mujer en la
Argentina por el solo hecho de ser mujer y a través de diferentes tipos de
violencias.
Las mujeres son
golpeadas en sus hogares, muertas en manos de sus parejas, violadas en las
calles, obligadas a ejercer la prostitución, maltratadas en los hospitales,
explotadas laboralmente, desaparecidas en redes de trata, perseguidas por su
activismo político, muertas por abortos clandestinos, abusadas por ser
indígenas o víctimas de crímenes seriales en la total impunidad.
Las formas de
ejercer esas violencias son múltiples: la cosificación y mercantilización de
nuestros cuerpos, la trata, el maltrato institucional (en hospitales,
comisarías, cárceles, juzgados, escuelas) la penalización del aborto, la
reclusión de nuestra vida al ámbito doméstico, los golpes, los femicidios, la
humillación, los celos, las violaciones...
Las violencias
hacia las mujeres también incluyen el hambre, la desocupación, el trabajo en
negro, la pobreza, la desigualdad de posibilidades, que nos impiden elegir y
tomar nuestras propias decisiones.
Las violencias
hacia las mujeres no son un problema particular o privado, son un problema
social y político, que tiene una historia de opresión y también de resistencia,
de lucha.
¿Por
qué una campaña contra la violencia de género? Porque luchar contra la violencia
de género es un acto de justicia, de dignidad, de solidaridad, de compromiso,
de humanidad…
La única forma
de terminar con la violencia de género es combatiendo el patriarcado, que es el
sistema en el cual vivimos. ¿Qué quiere decir patriarcado? El patriarcado es un
sistema de dominación que se basa en la idea de que las mujeres (y otras
identidades que no se asocian con la del varón dominante, como gays, trans,
intersex, queers y otrxs) deben tener un lugar subordinado en la sociedad. El
patriarcado es lo que hace que las mujeres debamos ser las que nos encarguemos
de las tareas domésticas, que podamos ser agredidas en la calle, que debamos
estar siempre alertas para no sufrir agresiones. Es lo que sustenta la idea de
que somos más débiles, menos inteligentes, más vulnerables; que hay cosas para
las que no servimos. Que los varones nos tienen que cuidar, sostener, decir qué
debemos hacer y qué no.
Mientras sigue
vigente, el patriarcado se reproduce en todas las formas de sexismo y machismo
que circulan en nuestra sociedad. Más allá de los avances de las últimas
décadas, aún falta muchísimo para que podamos alcanzar una sociedad
igualitaria.
En 2009 fue
sancionada la Ley 26.485 de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y
Erradicar la Violencia contra la Mujer. Nuevamente, en la letra, la ley es muy
completa, contiene mucha de las demandas históricas del movimiento de mujeres,
e implica un avance innegable. Sin embargo, a la hora de implementarla y
presupuestarla, las expectativas se ven frustradas por la falta de funcionarixs
idónexs, capacitación para el abordaje, centros de referencia, y un marco
estatal real de contención económica, social, humana, para las mujeres víctimas
de violencia.
Es necesaria una política integral para que no haya ni
una muerta más por aborto clandestino, para que aparezcan con vida todas las
mujeres secuestradas por las redes de trata, para no sufrir explotación
laboral, ni vernos forzadas a cumplir con los estereotipos que los medios de
comunicación, en fin para vivir digna y plenamente.
Debemos luchar por una sociedad sin violencia de
género en las escuelas, en las familias, en el trabajo, las calles, las leyes,
el estado. Debemos reclamar la efectiva aplicación de políticas públicas
integrales que combatan la violencia machista, la mercantilización del cuerpo
de las mujeres y niñas, la mortalidad de las mujeres por abortos inseguros, y
la violencia que sigue descargándose contra lesbianas, gays, bisexuales y
trans.
Contacto:
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